Wednesday, November 2, 2016

CONFERENCIA DE LA LIBERTAD



REFLEXIONES LIBERTARIAS
Ricardo Valenzuela
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La semana pasada el bello destino turístico de Puerto Vallarta fue escenario de un interesante evento que desgraciadamente ocurrió totalmente ignorado por los mexicanos, mas no así por el resto del mundo puesto que en el mismo se dieron cita participantes de todos los rincones del planeta: la conferencia anual de la “Sociedad Internacional para la Libertad Individual,” una de las organizaciones libertarias más influyentes en el contexto mundial.


Esta congregación de amantes de la libertad fue particularmente importante puesto que se desarrollaba en momentos en los que el mundo se agita entre crisis económico—financieras, amenazas de acciones terroristas, guerras en lunares específicos del planeta, rumores de guerras a escala mayor, inestabilidad que casi se puede calificar como anarquía en prácticamente toda América Latina etc, todos elementos especiales que incuban y promueven el regreso del medio ausente jinete de nuestro moderno Apocalipsis; El Estado intruso y opresor. El título de la conferencia nos exponía la intensidad y la importancia de la misma: “Cómo romper las cadenas de pobreza y subdesarrollo en América Latina.”

El evento produjo una constelación de las mentes libertarias más brillantes no sólo de Latinoamérica sino de todo el mundo; desde un Martín Krause Director de la Escuela Superior de Economía y Administración de Argentina; Manuel Ayau fundador de la Universidad Francisco Marroquín de Guatemala; Jacques de Guenin Presidente del Circulo Federico Bastiat de Francia; Enrique Ghersi Profesor de la Universidad de Lima en Perú y coautor con Hernando de Soto del famoso libro “El Otro Sendero;” Domingo Rangel líder de la oposición contra Chávez en Venezuela; Rigoberto Stewart fundador del único Partido Libertario en América Latina mismo que ya controla casi el 15% del Congreso de Costa Rica, y muchos otros que por motivo de espacio sería imposible enunciar.

Estos días de intenso trabajo fueron tan impactantes aun para un veterano libertario como yo, que no me permite el abarcar todos los temas abordados en un solo escrito. Mi primera sorpresa fue el percatarme de una ausencia casi total de participantes mexicanos más que nuestro pequeño grupo de Alianza Liberal; es decir, del total de los asistentes provenientes de todo el planeta, los liberales mexicanos no configurábamos ni el 10%, lo cual me produjo un halo de tristeza haciéndome pensar que tal vez no queremos realmente ser libres.

Desde la apertura vía un excelente mensaje de ese viejo liberal Manuel Ayau, transitando por las aventuras de Valentina Nicolae de Rumania, hasta el cierre que para mi sorpresa y orgullo estuvo a cargo de mi buen amigo Roberto Salinas León de TV Azteca; tuvimos la oportunidad de saborear los dulces manjares del verdadero liberalismo y algo más importante; el identificar y señalar nítidamente la forma tan burda en que se la ha desprestigiado por sus enemigos con sus fracasadas recetas Neoliberales, concepto que como dice mi amigo argentino Alberto Mansueti; es solamente la misma gata nada mas que revolcada.

A mi se me concedió la oportunidad de analizar el tema: “Porqué fallaron las Reformas mexicanas de los años 90.” Con tal asignatura me sentí como niño en juguetería pues son tantos los errores cometidos por nuestros salvadores que sin utilizar la discriminación, tiende uno a perderse en la inmensidad del universo de sus estupideces; pero hay algunas que son fundamentales. Al  dirigirme al auditorio les afirmé: Las reformas mexicanas fallaron en primer lugar porque se trataron de implementar por gentes que nunca creyeron en ellas; es decir, no eran verdaderos liberales. Fallaron por falta de un esquema legal que las enraizara pues con una constitución totalmente antiliberal en la cual la propiedad privada no existe, y sigue considerando al “Estado” como el rector de la economía; eran arenosos cimientos para el edificio liberal.

Las reformas fallaron porque a diferencia de Chile en México fueron tímidas, vacilantes e incompletas, no se llevaron hasta el final. Fallaron porque fueron implementadas por burdos asaltantes que las utilizaron como una novedosa oportunidad para una vez más defraudar el pueblo. En lugar del tradicional “manoteyo” como decía el paisano de Caborca, ahora se haría utilizando las nuevas y sofisticadas técnicas de Ingeniería Financiera. Fallaron porque las dos privatizaciones más importantes columna vertebral del proyecto; los bancos y teléfonos, fueron los fraudes  más grandes de la historia del país. Los bancos adquiridos por aprendices nunca se capitalizaron, y Telmex pasó de ser monopolio público a privado. Pero sobre todo fallaron por algo aun más importante; la falta de conciencia y cultura liberal de los mexicanos.

Para enriquecer el potaje se acudió al saboteo de la vieja guardia priista para asegurar su fracaso y recuperar el poder. Sin embargo, el consenso general de los participantes es que aun cuando las reformas en nuestros países se hubieran implementado de forma diferente, el cáncer de nuestro Continente sigue siendo fatídico hábito de nuestros políticos de gastar más de lo que se tiene, y Argentina es el caso mas reciente con Uruguay y Brasil en la antesala. Es tal nuestra falta de cultura liberal, que “los participantes” consideran a Gil Díaz un gran Secretario de Hacienda del mundo, mientras que los mexicanos quisieran lincharlo.
En palabras de Apuyelo: “El control del gasto público, el adelgazamiento del estado, la seguridad jurídica, las condiciones favorables para la inversión extranjera, la mayor flexibilidad laboral, el manejo prudente de la deuda externa, no son infames exigencias del FMI o formas de capitalismo salvaje, sino condiciones esenciales para el manejo de una economía sana en cualquier parte del mundo. Cuando se pretende como dicen nuestros congresistas, ser “humano y responsable” con los pobres sin este sustento y gastando más de lo que se tiene, se llega a la debacle y en vez de combatir la pobreza se le reparte en todos los niveles.”
 Todavía quedan en el continente desechos radioactivos del marxismo más recalcitrante. Esos desechos han contaminado. Y ahí andan los Chávez y los Cárdenas con ese discurso retro, sin reparar que el único país donde el modelo liberal se ha aplicado en su integridad, sin falsificaciones, es Chile, y no por casualidad es el único al margen de las turbulencias continentales. Ni un presidente socialista lo desecha porque él si ha entendido que funciona.
Hemos ignorado el ejemplo de Chile y ahora los abanderados son los libertarios Costarricenses quienes ya han retado al gran establishment y lo han hecho recular. Me atrevo a pronosticar el que Costa Rica será el primer país del mundo en elegir un presidente libertario. Otros seguirán su ejemplo. Por lo pronto; nos vemos el próximo año en Lituania.          

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